El pastor Mauro Santo, de la Asamblea de Dios de Cachoeirinha, Rio Grande do Sul, más conocida como AD55, hizo un llamado de ayuda a favor de las familias afectadas por la tragedia que asoló el estado. La iglesia abrió sus puertas y proporcionó su templo para recibir a familias sin hogar.
“Abran las iglesias, necesitamos toda la ayuda, ya que la situación es gravísima y todo el esfuerzo es todavía poco comparado con lo que estamos viviendo en el estado”, dijo el pastor a Gospel Prime.
AD55 puso el templo principal y algunas congregaciones a disposición para albergar a las personas afectadas por las inundaciones, a pesar de enfrentar desafíos como la falta de agua y una creciente demanda de ayuda. Un total de 235 de los 496 municipios del estado resultaron impactados de alguna manera, afectando a 351,639 mil personas.
“A pesar de la situación de calamidad, estamos felices de poder servir como iglesia en este momento. Estamos logrando ayudar de alguna manera a estas personas afectadas por esta tragedia”, destacó el pastor.
También mencionó la gran cantidad de voluntarios que se han acercado para ayudar de alguna manera, enfatizando la generosidad de las personas que buscan ofrecer asistencia en este momento difícil. Además, destacó la continua llegada de donaciones, demostrando la solidaridad de la comunidad.
Desafíos enfrentados
Respecto a los desafíos que enfrenta en este momento, el pastor afirmó que la iglesia está teniendo que lidiar con la falta de agua corriente, ya que en varias ciudades se ha cortado el suministro. También pidió donaciones económicas para comprar medicamentos, ya que la iglesia ha estado ofreciendo atención médica en el lugar.
La iglesia se encuentra acogiendo a las personas que fueron afectadas por la inundación en la ciudad de Canoas. El municipio fue uno de los más afectados el sábado (4) y el domingo (5) por el tsunami de agua dulce que sumergió el 60% de los 131 kilómetros cuadrados de la ciudad.